La Casa Rusa en Santiago organizó una serie de eventos con fin de celebrar el 79° Aniversario de la Victoria, que fueron visitados por más de 400 personas. Por la mañana, se llevó a cabo una ceremonia en memoria de los caídos en la Gran Guerra Patria en Iglesia ortodoxa rusa de la Santísima Trinidad y Santísima Virgen de Kazán.
Después del servicio conmemorativo, desde la Iglesia hasta la Plaza Ñuñoa, se realizó una marcha tradicional «Regimiento Inmortal», en el que participaron cientos de chilenos y compatriotas. Luego se realizó el concierto «Vals de la Victoria» en el que artistas de la diáspora rusa y residentes locales se presentaron con bailes, canciones y poemas de la época de guerra.
La Canción de Pablo Neruda se escuchó en su idioma original. En pantallas, los veteranos se dirigieron a los invitados, compartiendo sus recuerdos de la celebración de la victoria en 1945: «De ninguna persona he escuchado nada mas que ‘¡Venceremos!’» — dijo con lágrimas en los ojos Anatoly Fomichev.
Junto al escenario se exhibía una colección de artefactos encontrados en los campos de batalla cerca de Rzhev: ollas, cantimploras, cascos, palas de infantería del Ejército Rojo. Los objetos fueron entregados a Chile por el Museo de la Victoria de Moscú con la ayuda de la jefa del distrito de Tekstilshchiki, Alexandra Ignatyeva. Actualmente se están llevando a cabo negociaciones para exhibir los artefactos de forma permanente en el Museo Histórico Militar de Chile.
También se instaló una «cocina de campo militar» en la plaza, donde los invitados pudieron probar platos «menú de la victoria»: gachas de trigo sarraceno, pan de centeno con tocino y pepinillos agridulces, y vodka.