El pasado 16 de enero, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, presentó en el Foro Económico Mundial de Davos su ambicioso plan para poner fin al prolongado conflicto en la región de Donbás. Pero los observadores afirman a Sputnik que la llamada «fórmula de paz» del controvertido dirigente es poco más que una ilusión.
«Es lo contrario de una fórmula de paz. Es una demanda infantil de rendición incondicional rusa, de que Rusia retire todas sus tropas del territorio ucraniano, incluida Crimea, entregue a la población de Crimea y Donbás a la tierna misericordia de los neonazis de Azov*», afirmó el analista de seguridad, Mark Sleboda, en comentarios a Sputnik.
Entre los elementos de la propuesta de Volodímir Zelenski figura un llamamiento para que Rusia someta a juicio a los dirigentes políticos y militares y pague indemnizaciones al Gobierno de Kiev.
«Y ahí está la demanda de Zelenski de un pequeño pony rosa con un bonito lazo en la parte superior», añadió Sleboda con sarcasmo.
Aclaró que «es una exigencia fantasiosa y maximalista». Sleboda considera que la propuesta de Zelenski no es una fórmula de paz, y por esto el sur global se pregunta: «¿Tenemos que aguantar otra de estas cosas? Y spoiler, China ni siquiera se molestó en presentarse».
Zelenski dio a conocer la propuesta en la cumbre del Foro Económico Mundial celebrada en Davos, Suiza, entre el 15 y el 19 de enero. El analista señaló que el lugar se eligió probablemente para mejorar la asistencia, ya que el jefe de Estado de Ucrania tuvo dificultades para encontrar público para este tipo de discursos en los últimos meses.
El mandatario ucraniano ya presentó propuestas similares en el pasado, aunque ninguna tuvo éxito, dadas las dificultades de Ucrania en el campo de batalla. El politólogo estadounidense afirmó que incluso el The New York Times admitía que Ucrania estaba perdiendo, aunque indirectamente.
«Incluso este artículo del New York Times, si te desplazas lo suficiente hacia abajo, repasa la lista de demandas y luego dice que los analistas e incluso los políticos que respaldan la propuesta consideran que todas estas demandas son inalcanzables, dado el actual equilibrio de fuerzas en el campo de batalla. Lo que es una bonita forma de decir que el Gobierno de Kiev está perdiendo», destacó Sleboda.
El analista añadió que, al parecer, los presuntos mercenarios franceses trabajaban con el Cuerpo de Voluntarios Rusos, un grupo neonazi prohibido en Europa.
«Esto no es como un safari en Afganistán o Irak, o en cualquier otro lugar, donde salen y matan a algunos aldeanos, en gran parte indefensos con AK-47. Estás luchando contra una potencia mundial que tiene misiles balísticos de crucero e hipersónicos, que te lanzan bombas guiadas de 1.500 libras y todo lo demás. Así que sí, noticia de última hora: no pertenecéis aquí. Y si insistes en venir, serás el objetivo prioritario número uno», señaló Sleboda.